Es posible que, en determinadas situaciones, con amigos o familiares, saliese a la palestra la clásica pregunta: ¿cuál de los 5 sentidos es el más importante para ti? Y sin pensarlo mucho, la ‘vista’ sería la respuesta más común entre los presentes. Naturalmente son todos básicos, sin embargo, la vista es la encargada de procesar el 90% de la información que recibimos a diario. Pero lo más grave, es que, a pesar de su enorme repercusión en nuestras vidas, habitualmente no le prestamos la atención que se merece y únicamente nos acordamos de ella cuando surge un problema.
Seguir unas sencillas recomendaciones de salud visual en tu rutina diaria te ayudará a evitar gran parte de los problemas que podrían pasar factura. En Audioptica te ofrecemos una serie de tips con el fin de despejar alteraciones perfectamente evitables.
5 consejos de salud visual para introducir a tu rutina diaria:
- ¡Duerme suficiente! Si tu cuerpo está cansado, tus ojos también. Durmiendo todos los músculos se relajan. Las imágenes que has visualizado a lo largo del día llegan al cerebro donde se interpretarán y almacenarán. Durante la noche se regenera la rodopsina, que es el pigmento sensible a la luz. Además, que, una mala noche incrementa la fatiga visual.
- Usa tus ojos sin esfuerzo. Los ojos relajados ven mejor. Ver bien es ver sin esfuerzo. Por el contrario, con la irrupción de los smartphones, tablets y dispositivos electrónicos, el contraste y el brillo de una pantalla con el tiempo puede conducir a la fatiga visual. Asimismo, podría aparecer en algunos casos, el Síndrome visual informático tras un uso prolongado. Los síntomas incluyen dolores de cabeza, visión borrosa, dolor de cuello, ojos secos o rojos, fatiga, visión doble, etc.…
- ¡Estate al aire libre y toma vitaminas del sol con precaución! Si bien es cierto que la exposición a los rayos ultravioletas (UV) puede deteriorar la visión, y desembocar en la aparición de cataratas o degeneración macular, la toma de vitamina D que ofrece la estrella más luminosa es notable y necesaria. Así como su respectiva protección con gafas de sol homologadas que protejan de estos rayos.
- Evita frotarte constantemente los ojos. Pese a que sea un hábito prácticamente irremediable, hay que reducirlo lo máximo posible. Siempre que usas las manos para frotar los ojos hace que traslades una gran cantidad de bacterias a los ojos, y esto incrementa el riesgo de sufrir una infección ocular como conjuntivitis, problemas de párpados como blefaritis o el clásico orzuelo.
- Realiza un examen visual… ¡periódicamente! Es un asunto de vital importancia, aunque no tengas síntomas. No deberíamos esperar al dolor persistente en el interior de los ojos, enrojecimiento o pérdida gradual de la visión dado que como dice el refrán, ‘más vale prevenir que curar’. Si tienes antecedentes familiares de glaucoma o si padeces diabetes recuerda que existe más riesgo de problemas relacionados con la visión. Y si tienes alguna inquietud, ¡ven a Audioptica y te sentirás más tranquilo y protegido!