Los oídos en verano: un enemigo oculto

La llegada del calor nos ofrece diversión, alegría y… ¡mucha agua! Piscinas y playas son de los lugares más frecuentados en la época estival. Porque, ¿a quién no le gusta un baño en la piscina para combatir el calor? No obstante, es conveniente saber que un exceso de chapuzones puede antojarse algo peligroso para nuestros preciados oídos. Desde una simple pero molesta otitis hasta daños permanentes en el tímpano, por lo que es importante asegurarse de conocer las formas de evitarlas, así como sus remedios.

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¿Sabías cuál es una de las principales razones por las que se produce la otitis?

Es de las causas más graves de una otitis, y todo lo provoca una bacteria conocida como pseudomonas aeruginosa. Permanece presente en el agua, y desde ahí se traslada hasta el conducto auditivo o la membrana timpánica, donde causa una infección que puede producir un dolor tremendo, supuración o incluso la pérdida de audición. 

Confía en Audióptica para mantener tus oídos en condiciones con los siguientes consejos

Las zambullidas suelen ser las acciones más comunes de los jóvenes en los paraderos acuáticos. Si bien ofrecen una dosis de adrenalina, un frescor placentero, y a simple vista carecen de repercusión negativa, las realizadas a gran altura pueden dañar la membrana timpánica. Sabido esto, aquellas personas propensas al dolor de oídos frecuente han de tener especial cuidado ya que, de tener un impacto notable, podrían sufrir la rotura del tímpano o de alguno de los huesos del oído medio.

Por otro lado, sumergirse es otro habitual cuando estás en el agua. Ya sea para bucear o simplemente refrescarse completamente. Una vez más hay que aclarar que toda previsión es buena. Cuando el cuerpo se encuentra en una inmersión, la presión de la parte externa de la membrana timpánica se eleva y puede decantar una descompensación de presión entre las partes de los oídos, lo que propiciaría una rotura. La rotura de tímpano tiene como consecuencias dolores, sangrados, daños en la audición y pérdidas de equilibrio. Sensaciones que naturalmente, nadie quiere vivir.

Los cambios de temperatura bruscos son otro enemigo del verano. Éstos pueden llegar a causarte otitis medias agudas, congestiones o catarros. El origen de estas enfermedades se encuentra en los cambios de la mucosa provocados por la alteración de los vasos sanguíneos, que, al percatarse de una fuerte variación de la temperatura, provocan que la mucosa se vea mucho más expuesta a las infecciones exteriores.

Así pues, desde Audioptica volvemos a hacer hincapié en que, toda diversión es positivo, pero nunca está de más conocer nuestro cuerpo y nuestros sentidos, en especial el oído. Al fin y al cabo, la audición la vía habitual para adquirir el lenguaje, uno de los más importantes atributos humanos y, ¡el que nos hace disfrutar tanto de la música de los festivales veraniegos!

5 Consejos para cuidar tu salud visual

Es posible que, en determinadas situaciones, con amigos o familiares, saliese a la palestra la clásica pregunta: ¿cuál de los 5 sentidos es el más importante para ti? Y sin pensarlo mucho, la ‘vista’ sería la respuesta más común entre los presentes. Naturalmente son todos básicos, sin embargo, la vista es la encargada de procesar el 90% de la información que recibimos a diario. Pero lo más grave, es que, a pesar de su enorme repercusión en nuestras vidas, habitualmente no le prestamos la atención que se merece y únicamente nos acordamos de ella cuando surge un problema.

Seguir unas sencillas recomendaciones de salud visual en tu rutina diaria te ayudará a evitar gran parte de los problemas que podrían pasar factura. En Audioptica te ofrecemos una serie de tips con el fin de despejar alteraciones perfectamente evitables.

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5 consejos de salud visual para introducir a tu rutina diaria:

  • ¡Duerme suficiente! Si tu cuerpo está cansado, tus ojos también. Durmiendo todos los músculos se relajan. Las imágenes que has visualizado a lo largo del día llegan al cerebro donde se interpretarán y almacenarán. Durante la noche se regenera la rodopsina, que es el pigmento sensible a la luz. Además, que, una mala noche incrementa la fatiga visual.
  • Usa tus ojos sin esfuerzo. Los ojos relajados ven mejor. Ver bien es ver sin esfuerzo. Por el contrario, con la irrupción de los smartphones, tablets y dispositivos electrónicos, el contraste y el brillo de una pantalla con el tiempo puede conducir a la fatiga visual. Asimismo, podría aparecer en algunos casos, el Síndrome visual informático tras un uso prolongado. Los síntomas incluyen dolores de cabeza, visión borrosa, dolor de cuello, ojos secos o rojos, fatiga, visión doble, etc.…
  • ¡Estate al aire libre y toma vitaminas del sol con precaución! Si bien es cierto que la exposición a los rayos ultravioletas (UV) puede deteriorar la visión, y desembocar en la aparición de cataratas o degeneración macular, la toma de vitamina D que ofrece la estrella más luminosa es notable y necesaria. Así como su respectiva protección con gafas de sol homologadas que protejan de estos rayos.
  • Evita frotarte constantemente los ojos. Pese a que sea un hábito prácticamente irremediable, hay que reducirlo lo máximo posible. Siempre que usas las manos para frotar los ojos hace que traslades una gran cantidad de bacterias a los ojos, y esto incrementa el riesgo de sufrir una infección ocular como conjuntivitis, problemas de párpados como blefaritis o el clásico orzuelo.
  • Realiza un examen visual… ¡periódicamente! Es un asunto de vital importancia, aunque no tengas síntomas. No deberíamos esperar al dolor persistente en el interior de los ojos, enrojecimiento o pérdida gradual de la visión dado que como dice el refrán, ‘más vale prevenir que curar’. Si tienes antecedentes familiares de glaucoma o si padeces diabetes recuerda que existe más riesgo de problemas relacionados con la visión. Y si tienes alguna inquietud, ¡ven a Audioptica y te sentirás más tranquilo y protegido!

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Día Internacional del Glaucoma

Muchos habréis oído hablar de ‘glaucoma’. Una palabra curiosa, que suele pulular por los círculos de oftalmólogos y ópticos. El glaucoma tiene en el 12 de marzo su día internacional, y no es precisamente algo positivo. El glaucoma es una enfermedad degenerativa que afecta al nervio óptico produciendo una perdida de campo visual desde la periferia hasta el centro, llegando incluso a producir ceguera. Por norma general, suele ser peligroso dado que no muestra síntomas evidentes, y puede desembocar en la pérdida de la visión de la noche a la mañana. En un abrir y cerrar de ojos.

Sin un seguimiento y tratamiento apropiado, el glaucoma puede llevar a la ceguera, una de las peores discapacidades posibles. No obstante, el lado positivo de la balanza muestra que, con revisiones periódicas, la correspondiente detección temprana y un cuidado tratamiento, se puede preservar la vista, tan preciada como necesaria.

A raíz de tomar decisiones saludables será posible definir una rutina de salud que resulte beneficiosa para la vista. Asimismo, te ofrecemos los siguientes consejos sumamente útiles para tratar tu glaucoma.

¿Cómo controlarlo?

  • Conoce y pide consejo sobre tus medicamentos

Si estás tomando medicamentos, es importante que consultes con tu medico y comunicarle que tienes glaucoma y como lo estas tratando. Esto le ayudara a indicar tratamientos que no interfieran o sean incompatibles entre sí.

Convierte tus medicamentos y tratamiento para el glaucoma en parte de tu rutina diaria y cumple con las pautas marcadas por tu especialista.

  • Organízate

Mantener un registro de cada uno de los medicamentos que estés tomando es imprescindible, así como chequearse de forma periódica, antes de un viaje prolongado o comenzar un proyecto ambicioso y/o exigente.

Es esencial llevar a cabo una lista con todas las preguntas que puedan surgir sobre la salud de tus ojos, la vista o los propios tratamientos antes de ver al especialista. Una vez ahí, tome nota de las respuestas del médico.

  • Mantente saludable

Tener los ojos limpios, libres de cualquier sustancia que provoque irritación es vital. Así como consultar previamente antes de usar cosméticos para ojos. También importante no frotarse los ojos en exceso o usar equipamiento adecuado cuando sea necesario (como gafas de natación).

Cuidar el resto del cuerpo también influye, no únicamente centrarse en los ojos. Seguir una dieta equilibrada, hacer deporte, no fumar y mantener un peso saludable son otros de los factores que pueden ayudar a prevenir el glaucoma. También es recomendable controlar el nivel de estrés por ser también un factor de riesgo.

La miopía, un difuso problema, cada vez más presente.

El término ‘miopía’ es vox populi hoy en día. Todo el mundo, a pesar de no estar relacionado con el mundo de la visión, ha oído mínimo alguna vez este defecto visual. ¿Pero qué es exactamente? La miopía es un trastorno de la visión que se genera por los rayos de luz que no se enfocan adecuadamente sobre la retina. Estos rayos se ubican delante de la misma, y todo ello, debido a un problema de refracción en el globo ocular. Asimismo, como resultado, las personas con miopía no pueden ver claramente los objetos ubicados a cierta distancia, aunque pueden ver perfectamente de cerca.

Para ponerlo en contexto, más de la mitad (52%) de los jóvenes de entre 11 y 27 años tienen problemas visuales, siendo la miopía la más frecuente. Este dato aparece en el estudio realizado por la asociación Visión y Vida, denominado ‘¿Sabe cuidar la Generación Z de su salud visual?, donde reflexionaban e indagaban acerca de ese supuesto incremento de los trastornos visuales a merced de la moderna era digital. Existe una previsión futura de que la miopía va a establecerse como una especie de ‘pandemia’. Los daños que trae consigo incluyen el coste visual y la merma en la calidad de vida de las personas que la padezcan los mayores obstáculos. Otros, sin embargo, optan por no alarmarse y depositar la confianza en los profesionales mediante sus servicios.

¿Miopía o algo más grave: cómo lo diagnostico?

  • La miopía tiende a aparecer en la niñez, y progresa durante los años de crecimiento si no es correctamente tratada.
  • Las personas cuyos antecedentes familiares han padecido miopía tienen una mayor probabilidad de desarrollar dicho trastorno.
  • Si un niño tiene problemas para ver la pizarra o la pantalla del colegio, pero puede leer un libro con facilidad, es posible pensar que puede tenerla. Siempre es necesario consultar con el óptico antes de hacer cualquier conjetura.

¿Cuál es el tratamiento idóneo para la miopía?

Los expertos coinciden en que, aunque no se antoje peligrosa, sí que conviene tratarla por su posible desarrollo. Es ahí donde entran las ópticas en juego, con su arsenal de tratamiento. En Audióptica, tenemos alternativas para frenar ese trastorno que tanto te molesta. Con el uso de gafas o lentes de contacto te ayudamos a enfocar los rayos de luz sobre la retina, logrando una visión clara de los objetos que se encuentran a distancia. El control de miopía podemos resolverlo con las mencionadas lentes (Stellest de la marca Essilor) o con lentillas (MySight de la firma californiana CooperVision), ambas de altísima tecnología. No obstante, lo mejor que puedes hacer antes de guiarte por impulsos, es pasarte por uno de nuestras ópticas y ponerte en manos de profesionales.

La vista y la alimentación

¿Qué alimentos mejoran la vista?

Tras las navidades, no serán pocos los que desarrollen un singular pánico a su báscula. Una correcta alimentación estimula un adecuado funcionamiento de nuestro cuerpo e, innegablemente, una parte muy importante son nuestros ojos, los encargados de guiarnos a través del sentido de la vista. De esta manera, un deteriorado estilo de vida no únicamente puede, sino que contribuye de sobremanera a la creación de un grupo de imprevistos saludables que podrían resultar irrevocables.

Seguro que más de una vez has escuchado a tu abuela hablarte de lo buenas que son las frutas y verduras. ¡Y no se equivocaba! No son ellas las únicas culpables de que nuestra vista mejore, sino que una dieta equilibrada y variada es fundamental y beneficiosa para nuestra preciada vista. Además de, naturalmente, poder evitar la aparición o incremento de todo tipo de patología ocular que ponga en jaque nuestra visión amenazando con una progresiva pérdida.

No son pocos los nutrientes y vitaminas que contienen los alimentos para mejorar la vista. Muchos oyen acerca de las letras, pero no conocen su función y entres todas, la A, la E y la C son las más beneficiosas para nuestras retinas. La primera mejora la visión nocturna, la segunda contiene propiedades antioxidantes y la última forma un escudo contra radiaciones ultravioletas. 

Seguro que alguna vez has escuchado que la zanahoria es buena para la vista, y no es un ‘cliché’ de madre preocupada por la alimentación de sus hijos, sino que es completamente cierto. En gran parte gracias al Omega 3, muy presente en las propiedades de los alimentos como el caroteno, encargado de transformar en vitamina A y causante de la buena fama de las zanahorias para la vista. Sin embargo, no son lo único que puedes comer para potenciar tu salud visual. Por eso, hemos decidido abrirte el cajón de algunos alimentos claves que quizás no conocías y cumplen la función de ‘mejora visual’.

  • Hortalizas, en especial pimientos, zanahoria y cebolla

¿Qué es lo que te aportan las verduras? Te permiten apreciar mejor los pequeños detalles y ayudan a la prevención en la aparición de ciertos dilemas. Popeye da fe, y es que las espinacas le ayudaban a ver mejor a Brutus, su eterno archienemigo. El más conocido entre los alimentos para mejorar la vista, la zanahoria se ha agenciado de ese apodo de ‘potenciador de visión’ como si de una poción se tratase.

Pero como ella, que entre sus valores nutricionales destaca ampliamente el betacaroteno -encargado de impulsar a que la retina funcione correctamente-, también se encuentra la cebolla o el pimiento. Grandes aliados, mediante la quercetina que poseen, un compuesto único para el corazón y el cabello, pero que también se encarga de la prevención de cataratas -mayoritariamente en los diabéticos-. 

  • Frutos rojos y secos: arándanos y nueces mejores ejemplos

Los secretos curativos de los frutos rojos salieron a la luz durante la segunda guerra mundial. Cuenta la leyenda que los pilotos británicos antes de volar la consumían al notar cuando lo hacían una mejor adaptación a la luminosidad. Y es que, a parte de su deleitoso sabor, este tipo de fruto, así como los secos, contienen flavonoides, una amalgama de antioxidantes que previenen la acumulación de los radicales libres principales culpables del envejecimiento de las células oculares y sus lesiones internas. 

También a destacar las nueces en todas sus vertientes. Un alto contenido en vitamina B y E que los convierten en aliados perfectos para prevenir problemas en la mácula o las cataratas. Los cacahuetes, también son una muy buena fuente de Omega 3, por lo que son una excelente alternativa si el intenso sabor de las nueces te cansa.

  • Pescados azules; salmón, sardinas y mejillones, ¡qué delicia!

El pescado azul es otro de los mejores alimentos para mantener una ‘vista de águila’. Aporta Omega 3, que no solo ayuda a prevenir la degeneración macular, además se centra en la sequedad de ojos, un quebradero de cabeza para muchos. Entre los pescados más ‘positivos’ para tus ojos, se encuentra el delicioso salmón, así como las sardinas, boquerones, el atún o los mejillones. Evidentemente no tanto por su contenido graso, pero si que es recomendable comer una o un par de veces este tipo pescados a la semana.

  • Huevos y lácteos, fuente de Vitamina A

El huevo, al igual que muchos otros, no cumple únicamente con su función ‘ocular’, sino que ayuda a fortalecer el pelo y las uñas. Aporta un elevado contenido en Omega 3, zinc y luteína. Rasgos nutricionales que desembocan en una mayor facilidad para absorber los carotenoides. Las yemas son especialmente ricas en vitamina A, lo que ayuda a proteger la córnea del ojo. Misma función que los lácteos en todos sus derivados (si no amas la leche siempre puedes decantarte por yogures o queso). Incluir huevos y leche en tu dieta es una buena mezcla para mantener una óptima salud ocular. Sin más dilación, es hora de afrontar la realidad. Comenzar la etapa ‘détox’ post-navidad y con esta lista de alimentos para mejorar la vista que deberías incluir en tu dieta habitual, se podría considerar más fácil. De este modo, acompañado de hábitos saludables más allá de la alimentación, no solo alejarás, sino que podrás retrasar notablemente la aparición de ciertos problemas visuales.

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